El robot bípedo que redefine la movilidad humana
En un audaz avance tecnológico, investigadores del Centro de Tecnologías y Sistemas Autónomos (CAST) de Caltech, han desarrollado a LEONARDO (LEgs ONboARD drOne), un robot bípedo que fusiona la movilidad terrestre con la movilidad aérea. Esta ingeniosa modernidad de 76 centímetros de altura combina articulaciones múltiples en sus piernas con propulsores de hélice montados en los hombros, lo que le permite caminar, saltar, volar e incluso deslizarse en monopatín. Inspirado en el comportamiento de las aves que alternan entre caminar y volar, LEONARDO representa una nueva frontera en la robótica como lo es la locomoción híbrida.

Lo que hace que esta innovación tecnológica sea extraordinaria y revolucionaria es su capacidad para adaptarse a entornos complejos. Mientras los robots bípedos tradicionales se les dificulta transitar por terrenos irregulares y los drones consumen grandes cantidades de energía en vuelo, LEONARDO alterna estratégicamente entre caminar y volar según las condiciones del terreno. Esta característica lo convierte en un “androide de rescate” ideal para misiones en zonas de desastre, exploración de espacios urbanos inaccesibles o asistencia en tareas de mantenimiento en infraestructuras elevadas.
La revolución robótica también pisa fuerte en tierra firme
La innovación no se detiene en los cielos. En tierra firme, CORLEO, el robot cuadrúpedo desarrollado por Kawasaki, aporta al transporte personal una idea igualmente futurista. Este caballo biónico, impulsado por hidrógeno y diseñado para recorrer terrenos extremos sin dañar el medio ambiente, comparte con LEONARDO una visión de movilidad bioinspirada y sostenible. Mientras LEONARDO imita el vuelo de las aves, CORLEO emula la marcha de un caballo, con patas articuladas que se adaptan al pasto, nieve o escaleras. Ambos robots representan un cambio de paradigma: máquinas que no solo se desplazan, sino que interactúan con su entorno de forma intuitiva y eficiente. Juntos, marcan el inicio de una nueva generación de vehículos personales que podrían transformar desde el rescate en catástrofes hasta el turismo de aventura.
Tecnología al servicio de la inclusión
Más allá de sus habilidades acrobáticas, el impacto de LEONARDO en la calidad de vida humana podría ser profundo. En el futuro, versiones adaptadas de este robot podrían apoyar a personas con movilidad reducida, ayudándolas a superar obstáculos físicos que hoy limitan su autonomía. También podría colaborar en la entrega de suministros médicos en regiones remotas o convertirse en guías dentro entornos urbanos complejos, mejorando la inclusión y el acceso a servicios esenciales.
Un salto hacia el futuro
Este avance no solo representa un hito en la ingeniería robótica, sino que también muestra una nueva visión de cómo los humanos y las máquinas pueden coexistir y complementarse. LEONARDO no es solo un robot que camina y vuela: es una promesa tangible de que la tecnología puede imitar la naturaleza para servir al bienestar humano. En un mundo donde trasladarse es sinónimo de libertad, Caltech ha decidido apostar por un futuro más accesible, dinámico y conectado.