La capital italiana, Roma, continúa consolidándose como el destino turístico por excelencia del país, atrayendo a millones de visitantes de todos los rincones del planeta año tras año. A pesar de la emergencia de nuevos y atractivos destinos, el “top” de la lista lo sigue ocupando la Ciudad Eterna, reconocida por su incomparable patrimonio histórico y cultural.
Los datos recientes revelan que el Coliseo, el Foro Romano, la Fontana de Trevi y los Museos Vaticanos siguen siendo los lugares más visitados del país, demostrando que la historia y la belleza artística de la antigua capital del Imperio Romano siguen siendo un imán para los viajeros. A la cabeza de la lista se encuentra el Coliseo, que anualmente recibe más de 7 millones de visitantes, un número que evidencia el inquebrantable interés por la historia antigua.
La capital italiana ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, modernizando sus servicios turísticos sin perder su esencia. Se han implementado tecnologías innovadoras para mejorar la experiencia del visitante, como la compra de entradas en línea y las audioguías interactivas, facilitando la exploración de sus tesoros. Además, el Ayuntamiento de Roma ha puesto en marcha iniciativas de turismo sostenible para preservar el patrimonio y minimizar el impacto del flujo de visitantes.
A pesar de la competencia de ciudades como Venecia y Florencia, que también gozan de gran popularidad, Roma se mantiene a la cabeza gracias a su vasto y diverso patrimonio, que va desde las ruinas del Imperio Romano hasta el arte renacentista y barroco, sin olvidar la importancia del Vaticano.
Los expertos en turismo coinciden en que la capacidad de Roma para combinar su legado milenario con una oferta turística moderna y sostenible es la clave de su éxito continuado. La ciudad no solo atrae a los amantes de la historia y el arte, sino también a aquellos que buscan disfrutar de la dolce vita italiana.
Acerca de Roma
Roma, la capital de Italia, es una ciudad con casi 3,000 años de historia. Ha sido el centro del Imperio Romano y una cuna de la civilización occidental. Es hogar de la Ciudad del Vaticano, un enclave soberano del Papa, y de algunos de los monumentos más famosos del mundo, como el Coliseo, el Panteón y el Foro Romano.
