La creciente desigualdad social en el mundo pone en riesgo la estabilidad global
En un informe recientemente publicado por el Banco Mundial, se revela que la desigualdad social en el mundo continúa aumentando a un ritmo alarmante, según el informe, el 1% más rico de la población mundial posee más riqueza que el 99% restante, lo que evidencia una brecha cada vez más amplia entre los más privilegiados y los más desfavorecidos.
Esta creciente desigualdad social no solo afecta a nivel económico, sino que también tiene repercusiones en la estabilidad política y social de los países, la falta de acceso a oportunidades y recursos para las capas más vulnerables de la sociedad puede generar tensiones y conflictos que amenazan la paz y el
desarrollo sostenible.
Ante esta realidad preocupante, es urgente que los gobiernos y organizaciones internacionales tomen medidas concretas para reducir la desigualdad social y garantizar que todos los ciudadanos tengan igualdad de oportunidades, solo a través de un enfoque inclusivo y equitativo será posible construir un mundo más justo y próspero para todos.
